La Consejería de Salud y Familias ha concedido la distinción de 'zona cardioasegurada' a 14 nuevos espacios en la provincia de Córdoba, entre los que se encuentra la Residencia "Santísimo Cristo de los Remedios" de La Rambla. De este modo, la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias ha certificado la formación en soporte vital básico y en el uso de desfibriladores automáticos de estas entidades que disponen de los DEA (desfibrilador automático) con las condiciones que rige la normativa.
Según lo establecido en la Orden de 4 de junio de 2013 (BOJA 113/2013), la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias es la encargada de la gestión y registro de las organizaciones que disponen del certificado de 'zona cardioasegurada', que constata que dichas instituciones han formado a sus profesionales y han ubicado desfibriladores en sus instalaciones, en el número y los lugares adecuados.
Reconocimientos todos ellos que certifican que las instalaciones públicas y privadas distinguidas disponen de personal entrenado para actuar ante una parada cardiaca. La delegada de Salud y Familia, María Jesús Botella, fue la encargada de hacer entrega de estos distintivos a los responsables de estas instituciones, en un acto que tuvo lugar en la sala de juntas de la delegación territorial de Salud y Familias de Córdoba y que ha contado con la presencia del director del servicio provincial de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias 061, Antonio Mantero.
Según manifestó la delegada de Salud y Familias, “los profesionales de estas instalaciones acreditadas están capacitados para actuar de forma inmediata en caso de presenciar una parada cardiorrespiratoria, sumando sinergias a la posterior asistencia por parte de los equipos de emergencias sanitarias, con el objetivo de disminuir la mortalidad y las graves secuelas que puede producir, a través de una excelente actuación inicial”.
En la actualidad, existen 66 organizaciones diferentes de Córdoba y provincia que disponen ya del distintivo de ‘zona cardioasegurada’ que concede la Consejería de Salud y Familias, a través de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias, a las instituciones que lo solicitan y cumplen una serie de requisitos.
Según lo establecido en la Orden de 4 de junio de 2013 (BOJA 113/2013), la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias es la encargada de la gestión y registro de las organizaciones que disponen del certificado de 'zona cardioasegurada', que constata que dichas instituciones han formado a sus profesionales y han ubicado desfibriladores en sus instalaciones, en el número y los lugares adecuados.
Reconocimientos todos ellos que certifican que las instalaciones públicas y privadas distinguidas disponen de personal entrenado para actuar ante una parada cardiaca. La delegada de Salud y Familia, María Jesús Botella, fue la encargada de hacer entrega de estos distintivos a los responsables de estas instituciones, en un acto que tuvo lugar en la sala de juntas de la delegación territorial de Salud y Familias de Córdoba y que ha contado con la presencia del director del servicio provincial de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias 061, Antonio Mantero.
Según manifestó la delegada de Salud y Familias, “los profesionales de estas instalaciones acreditadas están capacitados para actuar de forma inmediata en caso de presenciar una parada cardiorrespiratoria, sumando sinergias a la posterior asistencia por parte de los equipos de emergencias sanitarias, con el objetivo de disminuir la mortalidad y las graves secuelas que puede producir, a través de una excelente actuación inicial”.
En la actualidad, existen 66 organizaciones diferentes de Córdoba y provincia que disponen ya del distintivo de ‘zona cardioasegurada’ que concede la Consejería de Salud y Familias, a través de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias, a las instituciones que lo solicitan y cumplen una serie de requisitos.
Requisitos ‘zona cardioasegurada’
La certificación de ‘Zona cardioasegurada’ se concede a aquellas instituciones que lo solicitan y que cumplen con una serie de requisitos, entre los que se cuenta disponer de un número determinado de desfibriladores externos automatizados en las instalaciones, que deben estar operativos y una ubicación adecuada, de forma que se posibilite que al menos el 75 por ciento de los usuarios de las instalaciones pueda aplicar la desfibrilación en un tiempo no superior a 3 minutos.
Además debe contar con un plan de formación para el personal ofrecido por instituciones pertenecientes al Consejo Español de Reanimación Cardiopulmonar y con un adecuado plan de mantenimiento de los DEA instalados, conforme a sus especificaciones técnicas y recomendaciones de los fabricantes, así como con un protocolo de activación interno para desplazar y utilizar el DEA mientras que se avisa y llegan los servicios de emergencias sanitarias.
Para cumplir con todas estas condiciones, la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias ofrece asesoramiento desde la Dirección del Servicio Provincial del 061 en la provincia cordobesa a la entidad solicitante de este asesoramiento.
Cadena de supervivencia
La importancia de contar con 'zonas cardioaseguradas' se debe a que las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en el mundo occidental y, entre ellas, ocupa un lugar destacado la muerte súbita cardiaca que suele ocurrir, de manera mayoritaria, fuera del entorno hospitalario.
La correcta atención a la parada cardiorrespiratoria consiste en la aplicación precoz de una serie de acciones conocidas como cadena de supervivencia que incluye, por este orden, el reconocimiento de la situación y activación del sistema de emergencias sanitarias, el inicio inmediato de las maniobras de soporte vital básico, la desfibrilación eléctrica precoz y la rápida instauración de las técnicas de soporte vital avanzado.
La certificación de ‘Zona cardioasegurada’ se concede a aquellas instituciones que lo solicitan y que cumplen con una serie de requisitos, entre los que se cuenta disponer de un número determinado de desfibriladores externos automatizados en las instalaciones, que deben estar operativos y una ubicación adecuada, de forma que se posibilite que al menos el 75 por ciento de los usuarios de las instalaciones pueda aplicar la desfibrilación en un tiempo no superior a 3 minutos.
Además debe contar con un plan de formación para el personal ofrecido por instituciones pertenecientes al Consejo Español de Reanimación Cardiopulmonar y con un adecuado plan de mantenimiento de los DEA instalados, conforme a sus especificaciones técnicas y recomendaciones de los fabricantes, así como con un protocolo de activación interno para desplazar y utilizar el DEA mientras que se avisa y llegan los servicios de emergencias sanitarias.
Para cumplir con todas estas condiciones, la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias ofrece asesoramiento desde la Dirección del Servicio Provincial del 061 en la provincia cordobesa a la entidad solicitante de este asesoramiento.
Cadena de supervivencia
La importancia de contar con 'zonas cardioaseguradas' se debe a que las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en el mundo occidental y, entre ellas, ocupa un lugar destacado la muerte súbita cardiaca que suele ocurrir, de manera mayoritaria, fuera del entorno hospitalario.
La correcta atención a la parada cardiorrespiratoria consiste en la aplicación precoz de una serie de acciones conocidas como cadena de supervivencia que incluye, por este orden, el reconocimiento de la situación y activación del sistema de emergencias sanitarias, el inicio inmediato de las maniobras de soporte vital básico, la desfibrilación eléctrica precoz y la rápida instauración de las técnicas de soporte vital avanzado.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL