La importante presencia de motoristas en determinadas carreteras, sobre todo durante los fines de semana del periodo estival, y los más de cien motoristas fallecidos en vías interurbanas en lo que va de año, ha llevado a la Dirección General de Tráfico (DGT) a intensificar la vigilancia de este tipo de vehículos en estas vías a lo largo de todo este fin de semana.
Los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil recorrerán los tramos de carreteras que habitualmente son transitados por motoristas para vigilar que la convivencia de estos vehículos de dos ruedas con el resto de usuarios de la vía sea la adecuada. La vigilancia se realizará a pie de carretera y desde el aire con los helicópteros de los que dispone la DGT.
Según el director de Tráfico, Gregorio Serrano, los adelantamientos antirreglamentarios, la ausencia del casco, los excesos de velocidad y el consumo de alcohol y otras drogas "son los principales factores de riesgo y la mayor parte de las infracciones que comenten los motoristas, de ahí que se incremente la vigilancia sobre estas variables".
De los más de 32 millones de vehículos que componen el parque automovilístico en España, algo más 3 millones son motocicletas, lo que representa el 9 por ciento del total del parque. En 2015, últimos datos consolidados de los que se dispone, los motoristas participaron en el 25 por ciento del total de accidentes con víctimas. En concreto fallecieron 329 motoristas y otros 2.599 resultaron heridos graves
Pese a que el 75 por ciento de los accidentes de motoristas se producen en vías urbanas, las lesiones más graves se producen en accidentes que tienen lugar en vías interurbanas (75 por ciento de los fallecidos y el 45 por ciento de los heridos graves).
Asimismo, el 5 por ciento de los usuarios de motocicletas fallecidos en las vías interurbanas no utilizaban casco, al igual que el uno por ciento de los heridos hospitalizados. En las vías urbanas, ocho de los 82 fallecidos en motocicleta en 2015 no utilizaban el casco, tampoco lo hacían el 3 por ciento de los heridos hospitalizados motoristas.
Su uso evita los golpes directos de la cabeza con el pavimento, con otro vehículos o con los elementos de la vía; evita que penetren objetos en la cabeza (piedras, hierros u otros objetos cortantes), absorbe parte de la energía del impacto y la distribuye por toda su estructura evitando se concentre en una parte concreta de la cabeza y evita la abrasión que sufrirían la cara y la cabeza al arrastrar sin casco por el pavimento.
Una de las medidas más eficaces que llevan a cabo los agentes para que los usuarios de motos hagan uso del casco es la inmovilización del vehículo, hasta que su usuario no disponga del mismo. Hay que recordar que su uso es obligatorio y no llevarlo supone una infracción grave sancionada con 200 euros y la detracción de tres puntos.
Al margen del uso del casco existen otros factores de vital importancia para la seguridad de los motoristas como el cumplimiento de las normas sobre velocidad, sobre el consumo de alcohol y/o drogas, adelantamientos; permiso de conducir y documentación del vehículo adecuada y en regla, además de utilizar un equipamiento apropiado.
Proteger al motorista
Con el objetivo de mejorar la seguridad vial del conjunto de usuarios de la vía y en especial los vulnerables, entre los que se encuentran las motos, el Ministro del Interior presentó ante la Comisión de Seguridad Vial y Movilidad Sostenible, una serie de medidas que de forma específica protegen a los motoristas.
Algunas de estas medidas son la racionalización de las zonas de adelantamiento, la instalación de cruces inteligentes o la nueva metodología para la determinación y estudio de los puntos negros, donde además de analizar de manera independiente los accidentes de motos, se están desarrollando herramientas de análisis para agilizar y perfeccionar dichos estudios.
Además, dentro del Consejo Superior de Tráfico, Seguridad Vial y Movilidad Sostenible, existe un grupo de trabajo sobre motocicletas, del que forman parte las organizaciones más representativas del sector de las dos rueda, en el que se plantean y debaten los problemas que afectan a la circulación y seguridad vial de este colectivo, principalmente la formación vial de los motoristas y las necesidades de investigación y conocimiento sobre la movilidad y siniestralidad de dichos vehículos.
Los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil recorrerán los tramos de carreteras que habitualmente son transitados por motoristas para vigilar que la convivencia de estos vehículos de dos ruedas con el resto de usuarios de la vía sea la adecuada. La vigilancia se realizará a pie de carretera y desde el aire con los helicópteros de los que dispone la DGT.
Según el director de Tráfico, Gregorio Serrano, los adelantamientos antirreglamentarios, la ausencia del casco, los excesos de velocidad y el consumo de alcohol y otras drogas "son los principales factores de riesgo y la mayor parte de las infracciones que comenten los motoristas, de ahí que se incremente la vigilancia sobre estas variables".
De los más de 32 millones de vehículos que componen el parque automovilístico en España, algo más 3 millones son motocicletas, lo que representa el 9 por ciento del total del parque. En 2015, últimos datos consolidados de los que se dispone, los motoristas participaron en el 25 por ciento del total de accidentes con víctimas. En concreto fallecieron 329 motoristas y otros 2.599 resultaron heridos graves
Pese a que el 75 por ciento de los accidentes de motoristas se producen en vías urbanas, las lesiones más graves se producen en accidentes que tienen lugar en vías interurbanas (75 por ciento de los fallecidos y el 45 por ciento de los heridos graves).
Asimismo, el 5 por ciento de los usuarios de motocicletas fallecidos en las vías interurbanas no utilizaban casco, al igual que el uno por ciento de los heridos hospitalizados. En las vías urbanas, ocho de los 82 fallecidos en motocicleta en 2015 no utilizaban el casco, tampoco lo hacían el 3 por ciento de los heridos hospitalizados motoristas.
Su uso evita los golpes directos de la cabeza con el pavimento, con otro vehículos o con los elementos de la vía; evita que penetren objetos en la cabeza (piedras, hierros u otros objetos cortantes), absorbe parte de la energía del impacto y la distribuye por toda su estructura evitando se concentre en una parte concreta de la cabeza y evita la abrasión que sufrirían la cara y la cabeza al arrastrar sin casco por el pavimento.
Una de las medidas más eficaces que llevan a cabo los agentes para que los usuarios de motos hagan uso del casco es la inmovilización del vehículo, hasta que su usuario no disponga del mismo. Hay que recordar que su uso es obligatorio y no llevarlo supone una infracción grave sancionada con 200 euros y la detracción de tres puntos.
Al margen del uso del casco existen otros factores de vital importancia para la seguridad de los motoristas como el cumplimiento de las normas sobre velocidad, sobre el consumo de alcohol y/o drogas, adelantamientos; permiso de conducir y documentación del vehículo adecuada y en regla, además de utilizar un equipamiento apropiado.
Proteger al motorista
Con el objetivo de mejorar la seguridad vial del conjunto de usuarios de la vía y en especial los vulnerables, entre los que se encuentran las motos, el Ministro del Interior presentó ante la Comisión de Seguridad Vial y Movilidad Sostenible, una serie de medidas que de forma específica protegen a los motoristas.
Algunas de estas medidas son la racionalización de las zonas de adelantamiento, la instalación de cruces inteligentes o la nueva metodología para la determinación y estudio de los puntos negros, donde además de analizar de manera independiente los accidentes de motos, se están desarrollando herramientas de análisis para agilizar y perfeccionar dichos estudios.
Además, dentro del Consejo Superior de Tráfico, Seguridad Vial y Movilidad Sostenible, existe un grupo de trabajo sobre motocicletas, del que forman parte las organizaciones más representativas del sector de las dos rueda, en el que se plantean y debaten los problemas que afectan a la circulación y seguridad vial de este colectivo, principalmente la formación vial de los motoristas y las necesidades de investigación y conocimiento sobre la movilidad y siniestralidad de dichos vehículos.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL
FOTOGRAFÍA: J.P. BELLIDO
FOTOGRAFÍA: J.P. BELLIDO