La Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía, a través del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (Ifapa), está trabajando en la caracterización de variedades de olivar hasta ahora poco utilizadas con el objetivo de constituir un banco mundial de aceite de oliva en el Centro Alameda del Obispo de Córdoba.
Así lo confirmó el presidente del Ifapa, Jerónimo Pérez, que destacó que "existe una gran diversidad de variedades para la producción de aceite de oliva virgen extra más allá de la Arbequina, la Picual o la Hojiblanca, que son las más cultivadas y conocidas actualmente en Andalucía".
El presidente del Ifapa añadió que estos trabajos de caracterización, conservación e identificación de diferentes variedades registradas en la actualidad "permitirán conocer mejor su potencial para la producción de aceites singulares, diferenciados y más apreciados por determinados sectores de consumidores".
Estos trabajos son posibles gracias a la información que genera la Colección Mundial de Variedades de Olivo del Ifapa de Alameda del Obispo, que permite la selección de variedades que se pueden incluir en los distintos ensayos comparativos de variedades y patrones que se establecen en España y principalmente en Andalucía, para los programas de mejora genética españoles y para los primeros estudios de genómica de olivo.
Pérez Parra concluyó que gracias a esta colección mundial que alberga el instituto, de gran valía para el sector, se provee de material vegetal a multitud de proyectos de investigación y transferencia tanto dentro del Ifapa como para diferentes entidades como universidades y empresas.
Banco Mundial de Germoplasma del Olivo
El Banco Mundial de Germoplasma del Olivo es una colección donde se conservan actualmente alrededor de 885 variedades de olivo de 23 países, cada una de ellas con unas determinadas características, entre las que se encuentran una gran gama de perfiles organolépticos que pueden brindar nuevas posibilidades para los aceites de oliva virgen extra de calidad.
Esta colección fue iniciada en 1970 con un proyecto de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en colaboración con el Gobierno español y su objetivo ha sido salvaguardar, evaluar, documentar y facilitar la utilización de todas las variedades cultivadas de olivo a nivel mundial.
Así lo confirmó el presidente del Ifapa, Jerónimo Pérez, que destacó que "existe una gran diversidad de variedades para la producción de aceite de oliva virgen extra más allá de la Arbequina, la Picual o la Hojiblanca, que son las más cultivadas y conocidas actualmente en Andalucía".
El presidente del Ifapa añadió que estos trabajos de caracterización, conservación e identificación de diferentes variedades registradas en la actualidad "permitirán conocer mejor su potencial para la producción de aceites singulares, diferenciados y más apreciados por determinados sectores de consumidores".
Estos trabajos son posibles gracias a la información que genera la Colección Mundial de Variedades de Olivo del Ifapa de Alameda del Obispo, que permite la selección de variedades que se pueden incluir en los distintos ensayos comparativos de variedades y patrones que se establecen en España y principalmente en Andalucía, para los programas de mejora genética españoles y para los primeros estudios de genómica de olivo.
Pérez Parra concluyó que gracias a esta colección mundial que alberga el instituto, de gran valía para el sector, se provee de material vegetal a multitud de proyectos de investigación y transferencia tanto dentro del Ifapa como para diferentes entidades como universidades y empresas.
Banco Mundial de Germoplasma del Olivo
El Banco Mundial de Germoplasma del Olivo es una colección donde se conservan actualmente alrededor de 885 variedades de olivo de 23 países, cada una de ellas con unas determinadas características, entre las que se encuentran una gran gama de perfiles organolépticos que pueden brindar nuevas posibilidades para los aceites de oliva virgen extra de calidad.
Esta colección fue iniciada en 1970 con un proyecto de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en colaboración con el Gobierno español y su objetivo ha sido salvaguardar, evaluar, documentar y facilitar la utilización de todas las variedades cultivadas de olivo a nivel mundial.
REDACCIÓN / ANDALUCÍA DIGITAL